Capítulo 35.
El otoño se acababa - con la ilusión de pasar las Navidades tranquila con mis hijas y mi amiga - transcurrían los días y meses-¡ meses¡ -
Todo está muy tranquilo ¿ no te preocupa? -me preguntó - me recorre la espina dorsal , una especie de calambres incluso estando dormida - despierto y tu a mi lado duermes y créeme - sonríes
No se que criterio tendrás sobre esto, solo te diré - nunca he dormido con más tranquilidad - ¡ se que lo conseguiré ¡
Nacerá mi hijo - o ,hija - ¡ te figuras, otra niña ¡ - nacerá sano - no he tenido más problemas ...y eso en parte te lo debo a ti. No solo tu compañía , tu ayuda en las tareas - el haberme dicho y hecho dar por desaparecido y por lo tanto abandono de sus obligaciones maritales - ¡ obligaciones maritales¡ -
Tu has conseguido que yo vuelva a sonreír - que vea un cielo azul , donde estaba gris- ¡ que mire a la gente sin tener que bajar la cabeza para que no vean las señales del "amor" ¡
Cuidar de ti - si- eso me ha valido para estar más alerta - he aprendido a mentir .
Y si muere el ¿ que harás?
Tu me lo preguntas - polvo eres y en polvo te convertirás - ¡ solo quedará la calavera ¡ ¿ y tu me lo preguntas? - no lloraré, ni reiré - ¡ viviré¡ - y no me sentiré culpable, si a eso te refieres - debería haberlo dejado morir , pero solo quería enseñarle que un pájaro enjaulado desea estar libre y cuando lo liberas posiblemente no sepa donde ir y se vuelva loco.
Lo que si me da que pensar - ha muerto la dueña del edificio , una anciana viuda sin herederos y dejó en testamento la casa a unas monjas ( no se a que convento) - bueno , da igual -
Si deciden ver su adquisición ...- con esto no contaba -la casa es tan vieja que quizás ni se preocupen .
Pero la preocupación - si la tuviese - sería por Tina - ella vive en un mundo , que no es este mundo , es uno que se ideó para sentir a solas sus pensamientos.
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