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miércoles, 20 de noviembre de 2013

Tiempos de Silencios.capítulo 19

Llevaba el asco en todo mi cuerpo - el olor a sudor rancio y cazalla del personal madrugador , contribuyo a salir corriendo escaleras arriba , para echar todo lo que contenía mi interior ...
Abrí la puerta despacio ...y silenciosamente me acosté junto a mis hijas .
Ya entraba el sol por las ventanas- esa luz que me daba la vida - fue la que despertó a mi buena vecina , que al verme en la cama se hizo tal lío - ¡ pero bueno , no la he sentido llegar ¡ ¡ soy un leño ¡ mujer - ¿ porqué no me despertó ?
Me dio pena ..contesté .
Pena - pena - ¡ que leche pena ¡ -
¿ Está bien , después de pasar toda la noche en el sofá ?
¡ Como una reina ¡ - voy a poner la cafetera ...
Deje Lola , ya me levanto yo...
¿ Usted ? si tiene una cara de cansada - ¡que parece que le duró mucho la sesión de cine¡
Pero hace bien - murmuraba - aprovechar que su marido tiene siempre ganas de jugar...
¿ Jugar ? -Eso era jugar¡¡¡pensé yo -
Voy calentando la leche para las crías - tiene suerte de no tener por marido a un borracho como mi Paco.
Suerte , si - espero que por mucho tiempo juegue solo - que también sabía como .hacerlo . me dije ...
Estaba vivo -¡ yo le dejé vivo ¡ cuando despierte y se dé cuenta ...¡ los gritos que dará ¡ -¡ intentará salir y no podrá ¡ - por esa parte , tranquila - comprobado - pero todavía estará durmiendo , rendido pero vivo ...
Suerte que tengo a Cuca - una perra pequeña y feucha - si no fuese por ella estaría viuda hace tiempo .
Aunque el está a mi lado - de eso no me quejo - pero de su ¨pirulí ¨- la bebida se lo está dejando como un gusano - ¡ no se ría ¡ -¡ esa es la sensación que me da cuando lo intenta¡ - de verdad .
Yo lo del piruli  no sabía nada  pero lo de Cuca si . Cuando se hacía de noche y no lo veía llegar , le decía a la perrita -busca a Paco - y salía disparada - sabía en que taberna encontrarle .
Más de una vez los vi - el haciendo eses, dándose traspiés ,y la pequeña perra pegada a su pierna derecha le guiaba hasta la casa .
Tenía que tomarme ese café y la faena de siempre - las niñas - limpieza ( aunque hoy eso podría dejarlo ) la compra - la comida ...tomé una segunda taza ...- el asco en mi boca no lograba quitarlo - .
Podría ser que la venganza, el rencor , la rabia , el dolor - como los caballos del Apocalipsis  me estuvieran anunciando el fin , que si abría la boca saldría como una lengua de fuego abrasador - sacando de mi todo el mal .
Pero tenía que seguir los planes trazados - ¡ no dejaría que el cansancio echara por tierra todo - ¡ tenía derecho a renovar y limpiar las heridas - tenía derecho a que mis pezones dejaran de sangrar y mi vagina descansara de tantas barbaridades...tenía derecho - y si se acababa el mundo entero me daba igual.

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