Buscar en este blog

domingo, 23 de marzo de 2014

Sigue.

Sigue.
-Había que mirar sus ojos,color caramelo,trasparentes,parecían pedir cariño, con su mirada te demostraba su agradecimiento por estar dentro de una familia,por tener un cojín blandito y caliente.Y nosotros estábamos con ella completando una familia -
-Buscábamos un nombre,decíamos nombres y nombres de perros ...Mi marido que parecía no estar dentro de la conversación dijo -¿porqué no la llamamos Pepa?-es menos cursi...y ella que estaba dormida o se hacía la dormida,levantó sus orejas ,dio un brinco y se vino hacia mi moviendo su rabo con alegría .Si,Si,SI,decía su rabo,Si decían sus ojos color caramelo.
-Formo tanta complicidad con todos nosotros,sabía la hora de llegada de mis hijos del cole,sabía que si yo ponía el mantel en la mesa era la hora de comer lo que suponía sentarse delante de su plato en la cocina y esperar.
-Eramos aparentamente una familia feliz,un modelo de familia,de puertas para fuera,pero nadie sabía lo que ocurría dentro de las sábanas de mi cama,
-¿Quien te ha enseñado esta postura?-¿quien te ha hecho esto mejor que yo?-
-Los celos le cegaban la visión de tal forma ...que me culpaba de cosas que solo ocurrian en su mente.
-Parece que hoy no tienes muchas ganas...te veo cansada ...ha estado mucho rato tu amiguito y te ha dejado satisfecha,pues ahora estoy yo y te aguantas...
-Y me dejaba como una ramera en una noche de semana santa.
-Allí estaba mi Pepa,que había estado tumbada debajo de la cama sin hacerse notar,lamiendome una mano cuando yo la bajaba buscando su caricia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario