Sigue.
-Mentí,mentí a todo los que preguntaban -con serenidad,aplomo,con la mirada alzada sin átomos de culpabilidad.
-Pero no podía mentir a mi amiga y cómplice Pepa,que con sus ojos color caramelo me pedía la verdad.Paseando las dos juntas,me senté en un banco,ella se puso enfrente de mi sentada esperando mis palabras...al final de mi relato y deseos de cambiar nuestra ruta,puso su cabeza apoyada en mi pierna -yo sentí su aprobación,su lealtad,su comprensión.
-Con rumbo nuevo ¿a donde?-
-¿No me dije,coger el timón y poner rumbo a un mundo nuevo?-
-Fue ligero mi equipaje,no podía llevar en mi maleta,malos recuerdos,culpas...saqué lo necesario ,encendí una vela debajo de la goma de la bombona del butano y cuando llegó su tiempo explosionó,no quedando nada más que humo y cenizas .
-Mientras yo recorría los campos hacia el sur,mis hijas dormitaban a mi lado,el paisaje cambiaba,el humo de la locomotora se pegaba al techo de los vagones,soñaba con un mundo nuevo,mi rumbo ¡el sur¡.
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